Los androides cocineros se están extendiendo por las cocinas de los restaurantes de Fast Food todo el mundo. Os enseñamos a Bruno, el robot de Zume Pizza que dentro de la cocina robótica se ha convertido en una estrella.
Zume Pizza es una empresa situada en Palo Alto, en California. Esta empresa nacida en Silicon Valley ha sido una de las pioneras en innovar añadiendo robots e Inteligencia Artificial en su proceso de realización de pizzas.
Julia Collins es su directora y cofundadora del proyecto Zume Pizza junto con Alex Garden, y han contado con una potente inversión que se cree que puede haber alcanzado la cifra de 750 millones de dólares gracias a SoftBank y el Fondo de inversiones Jerry Jang.
Una de las prioridades de la empresa es usar alimentos de calidad utilizando ingredientes de temporada. Buscar la eficiencia del servicio permite rebajar los costes y el tiempo de elaboración, con el fin de lograr bajar el tiempo de entrega a domicilio de una pizza en 22 minutos.
Para fabricar las pizzas, el restaurante ha contado con la colaboración de Aaron Butkus, un chef curtido en Nueva York y siendo en Estados Unidos uno de los mejores pizzeros.
Se trata de una cadena de montaje compuesta por cuatro robots y operarios que desarrollan las funciones de abastecimiento. El método de pedido se encuentra totalmente digitalizado, y cuando lo terminas, directamente se lanza una orden de pedido a la cocina.
El robot Doughbot se encarga de preparar la masa, y lo hace en un tiempo récord de 9 segundos. Mediante una cinta transportadora llega hasta Pepe y Giorgio, quienes son los encargados de echar las salsas, siendo el robot Marta quien se encarga de extenderlas. Un operario es el responsable de incluir los ingredientes seleccionados por el cliente en 22 segundos para posteriormente ser el brazo robótico Bruno quien la recoge y la introduce en el horno.
Después de permanecer durante 1 minuto en el horno a 800 grados la pizza se encuentra horneada y lista para ser retirada del horno, cortar las porciones y embalarla para transportarla al cliente.
Gracias a la automatización de gran parte del proceso, el robot es capaz de cocinar 370 pizzas a la hora.